Querer acelerar el aprendizaje en cualquier ámbito siempre ha sido una aspiración para muchos.
“Mientras más rápido aprenda mejor” pero es totalmente cierta esa premisa?
Esto aplica mayormente en el aprendizaje académico y profesional en el cual la agilidad es recompensada…
Pero en el ámbito personal la historia es distinta. El aprendizaje personal ocurre de manera progresiva y cuando se busca acelerar el proceso, pensando que se aplican las mismas reglas que en el aprendizaje académico o profesional usualmente el resultado es el bloqueo.
Un bloqueo a causa de querer forzar un cambio, experiencia o aprendizaje en sí, que te limita a hacer las cosas más simples. En el cual las tareas pequeñas se convierten titánicas. Y sientes que te estas superando en varios ámbitos pero menos como persona.
Y es totalmente comprensible, el desarrollo personal parece a veces un enigma, se piensa que hay un currículo como en el aprendizaje académico o profesional y que mientras más rápido se pueda comprender y pasar por el, mejor.
Lo bueno es que no es un enigma para nada, y que solo toma un poco de consciencia para comprender la longitud del currículo de aprendizaje personal ya que la maestra es la vida en si… Con tal conciencia podrás remover la neblina y percibir el aprendizaje dejando a un lado el afán y realizando que aprenderás cuando sea el momento.
Una vez te alinees con el “currículo de aprendizaje” que la vida tiene para ti. Dejarás de querer forzar las cosas y el resultado será el flujo de energía y acción proactiva que siempre has aspirado poner en marcha.
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